dijous, 13 d’octubre del 2011

Habré de disputar palmo a palmo el reconocimiento de mi talento, si es que lo tengo

----
----
A las seis, el cadáver de Papá Goriot fue bajado a la fosa, alrededor de la cual se hallaban los criados de sus hijas, que desaparecieron con el clero tan pronto como fue rezada la oración pagada al buen hombre con dinero del estudiante. Cuando los dos enterradores hubieron lanzado unas paletas de tierra sobre el ataúd para cubrirlo, se incorporaron y uno de ellos, dirigiéndose a Rastignac, le pidió la propina. Eugène buscó en sus bolsillos, pero no encontró nada, viéndose obligado a pedirle veinte sueldos prestados a Christophe. Este hecho, poco importante en sí mismo, provocó en Rastignac un acceso de horrible tirsteza.
El día se acababa y un húmedo crepúsculo contribuía a irritar los nervios. Eugène miró la tumba y sepultó en ella su última lágrima de hombre joven, una lágrima arrancada por las santas emociones de un corazón puro, una de esas lágrimas que, desde la tierra donde caen, vuelven a saltar al cielo. Se cruzó de brazos y contempló las nubes. Al verle así, Christophe le dejó.
Una vez solo, Eugène avanzó unos pasos hacia la parte alta del cementerio, desde donde pudo contemplar París, tortuosamente recostado a lo largo de las dos riberas del Sena. En la gran ciudad comenzaban a brillar las luces. Sus ojos se clavaron casi con avidez entre la columna de la plaza de Vendôme y la cúpula de los Inválidos, allí donde vivía aquel mundo en el que había decidido penetrar. Lanzó sobre aquel lugar una mirada que parecía libar la miel por anticipado, y dijo estas grandiosas palabras:
- Ahora nos toca a nosotros.
Y, como primer acto de desafío contra la sociedad, Rastignac fue a cenar a casa de la señora de Nucingen.

2 COMENTARIS:

Melomaníaco ha dit...

Papá Goriot, un gran novela de Balzac. Un buen libro no solo se nota por la historia en sí, ni la nitidez de la escritura, sino por los sentimientos que causa en el lector. En mi caso las hijas de Goriot me repugnan, y aunque Rastignac solo quiere ingresar a ese mundillo, al final es el único con cierta humanidad en su interior.

Miss L Viajera ha dit...

Un pasaje en concreto me conmueve especialmente: "Está comprobado que las almas hermosas no pueden permanecer mucho tiempo en este mundo. ¿Cómo podrían, en efecto, aliarse los grandes sentimientos con una sociedad tan mezquina y superficial?".

Pocos escritores fueron capaces de describir la sociedad de su tiempo con la grandilocuencia con que él lo hizo.

Su obra es todavía hoy, una lección.

Publica un comentari a l'entrada